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martes, 16 de abril de 2024

Las barcazas de la vida 

Por lo que cuentan los expertos, pues hablo por boca de otros, a los faraones los enterraban acompañados de la servidumbre, objetos, y utensilios que les debían servir para la gran travesía por el Nilo, y su disfrute allá en la otra vida.

 

A la vista de algunas paradas del mercado de los Encantes queda claro que aquella creencia no es propia de nuestra civilización. La vida intima de algunos seres humanos expuesta a la vista y tacto de todos. Objetos personales, álbumes fotográficos y recuerdos familiares, títulos universitarios y diplomas; cartas de familiares y amigos, agendas y dietarios, ajuares de boda con ropas de cama de hilo y ganchillo, retratos en sepia quemada, de niñas en traje de comunión, y novios el día de su boda, con esa cara entre ilusionados, asustados y orgullosos. Prendas íntimas que un día acariciaron su piel y hoy en día son manoseadas o pisoteadas por vendedores y compradores. En fin, el atrezzo de la obra teatral de su vida.

 

Algunas sociedades africanas dividen a hombres y mujeres en tres categorías o estados: los que aun viven en la tierra, o lo que es lo mismo, los vivos. Los fallecidos recientes, de los que aún quedan en la tierra gentes que los conocieron, formaron parte de su vida y los recuerdan, a los que denominan “Sasha”; y por último, aquellos fallecidos de los que ya no queda nadie en la tierra que hubiera coincidido en el tiempo con ellos, a quienes llaman “Zamani”; y parece ser que, mediante la memoria de una a otra generación, intentan no olvidar para que su muerte no sea absoluta.

Creo que cuando las diferentes religiones hablan de “la vida eterna” o “la otra vida”, en realidad se refieren a los Zamani; de ahí su interés en proclamar santos, líderes espirituales y demás figuras, para que su existencia no quede en el olvido y mueran definitivamente.

 

A la vista de lo expuesto en algunos puestos de los Encantes, quizás podríamos decir que, lo que los vendedores ofrecen al grito de “barato” o “a iuro”, es la muerte absoluta.